Con inspiración folk de la década de los 70 se diseñó la línea de jeans & sportwear con una paleta donde los colores cobre, off white y azul marino son los protagonistas, en prendas con el calce y confort característicos de la marca, en leggings y pantalones de línea A, de tiros altos como tendencia destacada para esta temporada combinados con maxisweaters y ruanas que evocan al poncho.
La sastrería impecable hace aparecer la figura “gentlelady” donde se destacan blazers ejecutivos, faldas rectas y pantalones de diferentes siluetas combinados con texturas satinadas en camisas y túnicas.
A la hora del cocktail las siluetas fluyen desde desestructuradas túnicas de gasa y sedas crepe con toques de apliques metálicos, hasta los clásicos smokings de la marca.
Este invierno la novedad es la línea de calzado y carteras, desarrollados íntegramente en cuero y de una manufactura sumamente artesanal en concordancia con toda la colección.
Los accesorios también fueron diseñados y desarrollados para esta colección.
Los anteojos son de la división óptica de Adriana Costantini.
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